Si de bodegones se trata... cada uno podrá recitar sus favoritos. De eso no hay dudas, tal y como en materia de pizzerías o de parrillas, cada quién defenderá el suyo con verdadera pasión futbolera. Por si alguien está perdido, le comento: hablamos de esos restaurants con fea decoración, con mozos con memoria prodigiosa, con cartas super extensas donde conviven el salpicón de ave y el lenguado al roquefort. Esos que tiene al menos 30 años con las puertas abiertas, donde las papas fritas Mc Cain no entraron jamás y el vino se sirve en jarras de 1/4, 1/2 y litro.
En este caso, la esquina que ocupa, no tiene ni uno ni 2 pisos... nono! ocupa 3 (tres) pisos con parrillón en la vidriera, despacho de comidas para llevar, pelotón de motos para el reparto y una cola eterna que desciende por las escaleras esperando que un señor mayor con corbatas de personajes de dibujitos animados los acomode en alguna mesa.
El servicio es muy muy bueno, los mozos tiene paciencia, cambian las guarniciones sin chistar, consiguen pancitos negros, sonríen ante las bromas de los clientes, jamás se olvidan el hielo y suben y bajan escaleras con inmensas bandejas cargadas de comida.
Como acá se viene a comer comida de toda la vida, pedimos lengua a la vinagreta ($23 la media porción) que viene en gruesas fetas tiernísimas y con la salsita un tanto excedida en vinagre y pasada por la procesadora por encima. También las rabas ($46) ni muy muy ni tan tan, aunque notablemente sequitas. Y para terminar el trío de clásicos el pollo a la provenzal ($69 el medio... comimos 3) que sale en bocaditos con papas noisettes de las de verdad. Los postres se veían bien, pero no compramos. Ojo que aunque es un restaurant muchos piden parrillada y pizzas.
Mi puntaje: 7
Rincón y Alsina, no hacen reservas.
martes, 28 de febrero de 2012
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Como siempre, seguimos tus consejos, y pedimos las rabas (excelentes y abundantísimas) y seguimos con algo de parrilla (mollejas, chinchulines y vacío). Todo buenísimo, a excepción de los chinchulines que estaban blandengues. Antes de irnos, probamos el budín de pan y el flan. Muy, muy ricos.
ResponderBorrarTodo es como lo describís y super recomendable.
Seguiremos leyendo el blog antes de salir en familia. No nos falla!!
Cuanto me alegro de q haya servido la recomendación!!
ResponderBorrarChinchulines nunca pedí, pero es bueno tenerlo en cuenta!!
Besos!!
Trix, nunca fuiste al tercer piso? A mi me mandaron ahi y la mesa estaba sobre una pecera...con pescaditos...vivos!!! Te juro que la mesa estaba sobre una pecera empotrada en el piso, absolutamene surrealista! La moza me dijo "estan estresados los pobres pececitos", una genia la piba. Este bodegon es posta-posta, pero labura tanto que aturde; hay que ir temprano y rajar, porque se come rico de verdad, pero es un despiole. Y hablando de mozos, coincido con vos, a pesar del lio y las escaleras siempre me atendieron bien.
ResponderBorrarPD: la larga cola ascendente por la escalera es otro delirio y además me parece que plantea problemas de seguridad...pero con esas milanesas uno se olvida.