viernes, 30 de mayo de 2014

Siga la vaca Costanera

Años sin visitar esta cadena y de pronto un domingo estábamos sin programa, ni ganas de prender la parrilla y decidimos volver a ver, de que se trata hoy por hoy, el lugar que lleva más de 10 años con extensas colas en todos sus turnos. 
Visitada por mucho "verde-amarelo" y otros extranjeros, la propuesta y la convocatoria gozan de buena salud. Si bien es cierto que la cantidad de cortes disminuyó, también es cierto q la era Menemista terminó hace rato y estos locales lograron sobrevivir.

El servicio es atento, aunque solo hacen de apoyo, pues es el sistema es autoservice, pero nunca falta nada de lo que se pide, se retiran los platos a tiempo y se ofrece lo necesario en todo momento. Los uniformes están en buenas condiciones, son simpáticos y amables. Y se nota el buen entrenamiento que tienen.

El sistema de la casa sale $175 por adulto con bebida y postre (best. value total) y a eso hay que sumarle que los niños de 3 a 9 años solo abonan $70. Es justo y lógico por lo poco que comen, cosa que no entienden otros propietarios. Si bien no hay animación infantil, siempre levantarse a elegir comida los entretiene.

En la mesa de entradas: ensaladas de todo tipo, simples o compuestas, vegetales frescos y dressings variados. Un par de quesos, jamón crudo y cocido, porotos, waldorf, y una lárga lista de etceteras. También hay puré en un rechaud. Se extrañan las empanadas recién fritas que tenían otrora.
De la parrilla: asada, entraña, vació, matambre... No está de más decir que la carne es grande, pero GRANDE GRANDE. Animales de los que necesitan mucho tiempo de parrilla con grasa amarilla que de no ser apartada minuciosamente hará estallar nuestras arterias en pedazos.  Muy buenos chorizos, morcillas y cortes de cerdo. Todo en un muy buen punto. También chinchulines, riñones y carrés mechados. Infaltable y muy bueno tanto el chimichurri como la salsa criolla.
Para postre: helados de buena calidad, flanes, panqueques y otro clásicos.



Mi puntaje: 7,5

Vaya con tiempo y dispóngase a esperar.