
El local es pequeño (no más ni tampoco menos que Ambiente Wok, que está enfrente o Tartán o Platón...) pero con su espacio menos aprovechado y más desangelado. Y con un defecto gigante : MUY MALA EXTRACCIÓN de humos y olores, lo cual lo convierte en enemigo de la secretaria perfumadita y del joven profesional al que lo espera una reunión. Con esto, quiero decir, que recomiendo pedir take away y salir huyendo.
En la puerta, hay un cartel pidiendo empleados, eso debería habernos alertado o preparado para lo que se vino: una espera de alrededor de 35 minutos, por nuestros combos! La chica que atiende el teléfono, abre la puerta y toma los pedidos, no es exactamente despabilada y su cara de sufrimiento ante el desborde, se hace tan evidente que uno mismo le daría una mano.
La comida está muy bien, en su relación precio-calidad-cantidad. Los combos van de los $27 a los $38 con un sandwiches enorrrrme, papas fritas caseras y un jugo típico o gaseosa. Además tienen 20% off con Club La Nación. Pedimos el de Pechuga imperial (hilos de pechuga, queso cheddar, lechuga y papas pay) abundante, sabroso y fresco con un jugo de papaya muy sabroso peeeero.... SIN HIELO!! También probamos el de chicharrón peruano (bondiola de cerdo en sus jugos, lechuga y cebolla colorada cruda) un poco más pesado y seco, no se beneficia con un pan tan esponjoso y un corte tan grueso de la carne.
Mi puntaje: 6,5
Marcelo T de Alvear 990.